Tanto conductores como acompañantes han tenido en algún momento algún tipo de colisión con otro vehículo. Cuando nos chocan levemente el cuerpo experimenta un movimiento brusco para el que no está preparado. Si el golpe se produce desde detrás, aunque sea leve, el movimiento de cabeza de adelante hacia atrás de forma brusca puede generar lo que se conoce como latigazo cervical y hoy analizamos su tratamiento osteopático.
El tratamiento con osteopatía del latigazo cervical
Muchos no le dan gran importancia a los accidentes leves porque no parecen complicar más que al coche, pero lo cierto es que tras un impacto de este tipo estamos en shock y puede que inmediatamente no sientas molestias.
Sin embargo, no deberías quitarle importancia. Visitar al médico aún cuando no se siente dolor es la mejor manera de evitar complicaciones pasadas unas horas o días después del accidente. Ten en cuenta que, cuando las cervicales se someten a este movimiento brusco, pueden dañarse las articulaciones intervertebrales (ubicadas entre las vértebras), los discos y los ligamentos, los músculos cervicales y las raíces nerviosas.
Este tipo de traumatismo no solo se da en accidentes de tránsito, sino que también es común en los deportes de contacto, caídas o como resultado de sacudidas violentas y rápidas.
Al ser una lesión que afecta a los tejidos blandos, se puede tratar con osteopatía el whiplash.
¿Qué síntomas tiene el latigazo cervical?
Los síntomas de este tipo de lesiones suelen aparecer unos días después de la lesión y entre ellos se encuentra:
- Dolor de cuello y rigidez
- Empeoramiento del dolor con el movimiento del cuello.
- Pérdida de rango de movimiento en el cuello.
- Dolores de cabeza, que suelen comenzar en la base del cráneo.
- Sensibilidad o dolor en el hombro, la parte superior de la espalda o los brazos.
- Hormigueo o entumecimiento en los brazos
- Fatiga
- Mareo
Hay personas que experimentan visión borrosa, pitidos en los oídos, problemas del sueño, irritabilidad o depresión.
Quienes experimentan síntomas como dolor severo de cuello, rango de movimiento limitado y dolor que se extiende a los brazos con mayor intensidad tras la lesión son más propensos a tener un dolor crónico a causa del latigazo cervical.
La velocidad a la que ocurrió el accidente, la edad de la víctima y problemas de espalda anteriores también son factores que aumentan el riesgo de tener complicaciones por whiplash.
El médico corroborará con el paciente el rango de movilidad del cuello para determinar si se sufre de latigazo cervical. El diagnóstico se puede realizar también a través de pruebas de imágenes especializadas, como tomografías computarizadas o imágenes por resonancia magnética (IRM), para corroborar daños en los discos, músculos o ligamentos que podrían estar causando los síntomas del latigazo cervical.
La osteopatía en el latigazo cervical: fascia y articulaciones
Las lesiones que se presentan por latigazo cervical afectan principalmente a los tejidos blandos. Los médicos por lo general recomiendan el uso de antiinflamatorios de venta libre, pero lo cierto es que una lesión de este tipo demanda de un tratamiento sobre la fascia y las articulaciones.
Antiguamente se solía inmovilizar el cuello durante un tiempo como forma de recuperación. Sin embargo, en la actualidad los médicos recomiendan recuperar la movilidad lo antes posible porque ayuda a que la recuperación sea más rápida.
Durante las primeras 24 horas después del accidente se debe aplicar hielo en intervalos de 15-20 minutos para ayudar a desinflamar y aliviar las molestias. Si bien el dolor puede ser intenso al principio, lo ideal es ir recuperando de a poco el rango de movimiento del cuello con pequeños movimientos.
Dentro del tratamiento recomendado en osteopatía para el latigazo cervical están las terapias físicas que trabajen sobre la zona afectada.
Masajes suave de presión y fricción
El osteópata practicará masajes suaves de presión y fricción sobre los tejidos para tratar de liberar la tensión de los tejidos blandos (ligamentos, tendones, músculos) así como la movilización articular para aflojar articulaciones rígidas. El tratamiento con calor, además, estimula la circulación y hace llegar más oxígeno y nutrientes al foco del dolor.
Fomentar la flexibilidad
El paciente deberá hacer ejercicios para fomentar la flexibilidad, la fuerza y una buena postura ayudado por el osteópata. Ejercicios isométricos de baja carga, de resistencia postural y de fortalecimiento son los más comunes en estas terapias.
Reentrenamiento de los músculos
El osteópata también seguirá programas de reentrenamiento de los músculos finos del cuello para fortalecer la zona. Otra área que es muy importante trabajar es la fascia, porque son los tejidos que amortiguan el impacto. Los masajes en este caso estarán orientados a la liberación miofascial para aliviar el dolor.
Es importante que el paciente no deje de hacer su vida con normalidad. Siempre teniendo en cuenta que hay una lesión, por lo que debe evitar levantar peso, o suspender algunas actividades deportivas o que impliquen movimientos de torsión.
La importancia de la postura de la espalda
Si el paciente está mucho tiempo sentado, entonces se recomienda que tome descansos con mayor regularidad y que tenga particular cuidado con la postura de la espalda. Incluso después de recuperarse del latigazo cervical, el trabajo sobre la postura de la espalda debería ayudarlo porque podría prevenir otras formas de dolor de cuello.
Si no hubiese una mejoría entre las siguientes 4 y 6 semanas de comenzado el tratamiento y si se siguen presentando síntomas como entumecimiento, debilidad o hormigueo en un brazo o una mano entonces se debe dar seguimiento para descartar una lesión en la espina dorsal.
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